Es muy claro cuando nos concentrarnos en las formas y detalles de cada una de las fiestas judías, como ellas tenían una fundamental importancia en reflejar aspectos esenciales del plan de salvación en la vida del Mesías. Como cada fiesta representaba los pasos fundamentales que Jesús daría para poder darle otra oportunidad a este mundo hundido en el pecado. Pero lamentablemente vemos en la historia que este pueblo, comisionado en declarar esta verdad al mundo, no comprendió como debía este mensaje tan precioso para todos.
Intentaremos basarnos en una de las fiestas que encerraba un hecho muy significativo y de vital importancia en la vida de Cristo y para la humanidad. Es La fiesta de las gavillas o de las primicias.
Las ordenes de Dios de cómo debían llevarse a cabo, en tiempo y forma, cada festividad a lo largo del año, las encontramos en la Biblia en el libro de Números (cap.28, 29) y en Levíticos (cap.23). Tomando como referencia este ultimo libro del Pentateuco, es curioso ver porque el Señor coloca allí estos preceptos, entendiendo que la santificación y la remisión de pecados para su pueblo, son los objetivos centrales en el.
En el primer mes, a los catorce días, el pueblo de Israel debía celebrar la primera fiesta que era La Pascua, seguida por Los panes sin levadura. Inmediatamente el Señor les da la siguiente indicación: ...luego que hayan cosechado su trigo, traeréis al sacerdote una gavilla por primicia de los primeros frutos de vuestra siega. Y el sacerdote mecerá la gavilla delante de Jehová, para que seáis aceptos; el día siguiente del día de reposo (Sábado) la mecerá.(Levíticos 23:10,11). Esto significaba que luego de realizar las primeras dos festividades, al domingo siguiente, los israelitas, se tenían que presentar en el templo ante el sacerdote y entregar su gavilla mecida junto con otras ofrendas pedidas por Dios. Este acto se realizaba muy temprano por la mañana.
Si bien, uno de los objetivos de este ritual era el demostrar gratitud a Jehová por la producción de la cosecha que comenzaba, tenía también una aplicación muy trascendental en la vida de Jesús. Y así lo declara el apóstol Pablo: Mas ahora Cristo ha resucitado de los muertos; primicias de los que durmieron es hecho.(1 Corintios 15:20). Así como la pascua representaba la muerte expiatoria de Cristo en la cruz, la fiesta de las primicias representaba su vuelta a la vida luego de permanecer por tres días en el sepulcro.
Muchas veces al meditar en el plan de salvación tendemos a concentrarnos exclusivamente en la cruz del calvario, y no esta mal hacerlo. Pero aquí nos encontramos con un acontecimiento no poco menor. El Rey y Hacedor de todas las cosas, estuvo dispuesto a enfrentar y gustar no solo la muerte primera, sino también la muerte segunda, la muerte eterna, tomando el lugar que nos correspondía ocupar y movido hacerlo tan solo por el amor entrañable que siente por una humanidad que no lo tiene verdaderamente en cuenta. Fue algo verdaderamente increíble que esto allá sucedido. Nuestro Padre celestial venciendo grandemente a nuestro terrible enemigo y en su propia cara.
Ahora esto nos da algunas pautas muy lindas para aprender de parte de nuestro Señor. Una de ellas es ver como Dios pretende que nuestra salvación sea algo agradable, algo que podamos disfrutar viviendo en este mundo, y no algo pesado de llevar o que creamos imposible de alcanzar. Por eso se dio a conocer a través de aquello que nos gusta tanto a todos, a través de fiestas. Claro que si!!, porque el Señor es divertido, alegre, y porque Él solo quiere vernos felices a su lado por la eternidad. Que por costoso y doloroso que fue el precio de nuestra redención, el camino hacia la salvación debería serlo de una manera feliz.
Pero, al ver exclusivamente este fragmento, el de la resurrección de Cristo, la primicia de los que duermen, nos da una las mayores esperanzas. Para aquellos a quienes los alcanzo la muerte, o a nosotros mismo si alguna vez tenemos que afrontarla, de que como Él pudo vencerla, nosotros, si somos fieles, también podremos triunfar sobre ella.
La pregunta entonces seria si estamos dispuestos a vivirlo y a entenderlo de esta manera.